sábado, 16 de febrero de 2008

Geometría de Autor



No estaría mal parafrasear (y reutilizar) el concepto de aquellos célebres críticos de Cahiers du Cinéma y referirnos a la obra de Lozza como una geometría de autor. Y es que, fiel a un estilo, sus propuestas estuvieron signadas por una subjetividad radical. Hace ya mucho tiempo que Pablo Siquier llamó la atención sobre esta productiva paradoja: fuertemente marcado por utopías sociales cuyos modelos fueron propios de otro contexto sociocultural, en nuestro medio la praxis artística de Lozza se transformó en un ejercicio obsesivo e intimista al extremo. No fue ajeno a esto el hecho de que, a su vez, quienes se acercaron a su estética en su oportunidad fueran adictos tan sofisticados intelectualmente como poco numerosos. Sus métodos no podían no estar en frecuencia: el Perceptismo, movimiento que creó a fines de la década del 40, tuvo una gran figura relevante: él mismo. Secundado por el crítico y filósofo Abraham Haber, lo más importante que el Perceptismo nos legó comienza y termina en sus obras. Todo un capítulo clave del arte argentino.

Raúl Lozza (1911-2008)
Publicado en Perfil Cultural, el 10 de febrero.