"Todo el surrealismo entero entra en esa breve, emotiva e incompleta descripción que hizo Hoffmann de su primer viaje. Es maravilloso pensar que en sus últimas ensoñaciones se haya llevado a Limbolandia (aguante el Limbo) imágenes de un director de cine sin nombre que operó modificando los circuito sde su cerebro, haciendo de su masa encefálica un perfecto arduino"
El párrafo anterior es un extracto de la última entrega de la página "Escenas de la vida transversal", en en número de la revista La Mano de este mes. Esta rosa de los vientos a cargo de Fernando García esta vez está dedicada al recientemente fallecido (a los 102 años) Albert Hoffmann, científico suizo creador del LSD.
Atreverse al hardware, de eso se trata. Este mes, Fernando se mete con un arduino de los más pesados.