domingo, 25 de enero de 2009

Cultura Web versus Software Studies


No se trata de eso ni mucho menos. Cultura Web, en tanto plataforma de investigación no se erige “contra” los Software Studies. Valga la aclaración de antemano para despejar fantasmas. Sólo que el objeto es diferente. Los Studies se erigen sobre la siguiente descripción

“Científicos sociales, filósofos, críticos culturales, teóricos de los medios y nuevos medios ahora parecen enfocarse en todos los aspectos del la revolución IT, creando un número de disciplinas como la cyber cultura, estudios de la Internet, teoría de los nuevos medios y cultura digital. Pero el motor que propulsa la mayoría de estos sujetos de investigación—el software—ha recibido poca o ninguna atención. Software todavía es invisible para la mayoría de los académicos, artistas, y profesionales culturales interesados en IT y sus efectos culturales y sociales. Pero si continuamos a limitar discusiones a nociones de “cyber,” o “digital,” o “new media,” o “Internet,” caemos en el peligro de siempre enfocarnos en los efectos y no las causas; lo cual aparece en la pantalla del ordenador en vez de los programas y culturas sociales que fomentan los productos. Por esto estamos convencidos que “El Estudio del Software” es necesario y nosotros invitamos a ustedes a ser parte de nuestros proyectos y actividades.”


Cultura Web, diversamente, centra sus investigaciones en la Web y sus enormes implicaciones culturales. ¿El huevo y la gallina? En parte: si el objeto de estudio es el software, las aristas de investigación se expanden de sobremanera (las implicancias del software se dispersan tanto más allá de la red), pero también se limitan (si el software es el centro desplazamos los conceptos, ideologías, estrategias y cosmovisiones que lo conforman, naturalizándolas, dándolas por definitivamente adquiridas). En Cultura Web estudiamos el software como producción cultural en tanto se trata de uno de los motores (el más importante) de la cultura en tiempos de Internet, pero no el único. Consideramos clave entender, desde otra perspectiva, cómo el software y no sólo él posibilitan eso que llamamos “pensamiento y cultura en red”, no (sólo) en cuanto especulación filosófica, esto es, a posteriori (Virilio, Serres) sino en cuanto taller de prácticas para el cual los efectos resultan tan importantes y simultáneos que sus causas. Parafraseando a Spinoza, hay que ver “lo que puede la red”.