Lo cierto es que, sacudida de su contexto, toda pregunta es extraña.
Segunda parte de algo que tuvo su primera entrega acá.
Los cuestionarios de Daisy Aisenberg revisitados.
1. ¿Cuál es el color local?
¿Perceptivo? ¿Simbólico? ¿Una mezcla de ambos?
¿La idea que tenemos de nosotros? ¿Aquello que nos invade?
El celeste por supuesto que no. Esa es una vieja herencia borbónica cara a Belgrano. Y digo esto porque creo que el color local es aquello que resistimos. Una fijación semiótica que jamás nos representa. Mejor, siempre, darlo por sobreentendido y malinterpretarlo a gusto.
2. ¿Cuál es tu eje de investigación?
Ciertas zonas, nunca hegemónicas, de la percepción cultural. Sigo esas tramas en el arte contemporáneo, en la literatura, en las historietas, en algunos discursos sobre nuevas tecnologías. La problematización de percibir está invariablemente presente. Cambiaría la palabra problematización por curiosidad.
3. ¿Cuál es el límite que se está rompiendo?
Jamás concedí ningún privilegio a la noción de límite y menos aún a la de ruptura. En mi interés son simplemente dos elementos más. A veces hacemos foco en esa conjunción, pero no me parecen a priori significativa.
4. ¿Cuál es el otro lado?
El que te inventás. El que los demás inventan para vos. Me suceden ambas situaciones. Depende de las ganas que tenga en el momento de aclarar esa topología. Depende de quien la enuncie, también.
5. ¿Cuál es la diferencia entre net art y arte digital?
El primero es una sub-especie del segundo, acaso pionera. El net art es un parámetro atendible a la hora de repensar la materia “digital” en las artes. Sobretodo porque desde el vamos da por tierra el imperativo de representación para ubicarse en el terreno siempre más resbaladizo del puro efecto.
6. ¿Cuál es la diferencia entre interpretación y descripción?
Que la descripción no rezuma apodictismo. Nada menos neutro que una descripción, sin embargo si se trata de un Caballo de Troya este punto no se transforma en un espectáculo.
7. ¿Cuál es la diferencia entre opinión y comentario?
Lo primero que se me ocurre es que el segundo tiende a ser menos meditado. Más liviano. La opinión implica más una toma de partido.
8. ¿Cuál es la diferencia entre resolver un conflicto y disolverlo?
¿Disolverlo es abandonarlo de a poco? Tratándose de un conflicto lo que me importa es la efectividad, y creo que una posibilidad u otra pueden proporcionarnos buenos resultados. Por otra parte, muchas veces creí que había resuelto conflictos y ahora pienso que los disolví y al revés. No creo, sin embargo, que la disolución sea una categoría de la resolución.
9. ¿Cual es la diferencia entre un artista que trabaja por la urgencia de la creación y un terrorista que tira una bomba por la urgencia de la realidad?
Lo obvio: en el segundo caso no te caben dudas de que harás daño. Una obra también puede hacer daño, pero no con la certeza de que estos será definitivos.
10. ¿Cuál es la importancia del hastío en tu sistema de producción?
No es tan fácil evaluarlo. Muchas veces estoy realmente harto de algo que estoy haciendo y, pasado el tiempo, no sólo me reconcilio sino que disfruto y mucho e lo que me brindó. No son pocas veces las que disfruto a posteriori, aunque en general me divierto mucho “en tanto”.
11. ¿Cuál es la obra que te representa?
No hablaría de obra sino de forma, y esta forma es el ensayo. Hablar de obra implicaría fijarme en un resultado. Prefiero en todos los casos el movimiento. Escribir o hacer ensayos (una curaduría es un ensayo, tal como la practico) es apostar definitivamente al movimiento. A la modificación.
12. ¿Cuál es la diferencia entre creer y exponer?
¿Todos y cada uno de los expositores creen en lo que exponen en un 100%? ¿Qué tan grande es el espacio para la duda? ¿A veces no se expone para saber si se cree? ¿Exponer no implica también poner a consideración una apuesta?
13. ¿Cuál es la utilidad de la descripción?
La captura de una subjetividad que nos interese. Nada más subjetivo que una descripción: aprendemos mucho de quien la enuncia.